EL HOMBRO SEGUN ROCKWOOD Y MATSEN (2 VOLUMENES)

DESCRIPCIÓN

Escon gran placer que ofrecemos a nuestros lectores una quinta ediciónextensamente revisada de El hombro, un libro que se ha convertido en el recursodefinitivo sobre la anatomía, la mecánica, la evaluación y la gestión delcomplejo articular más interesante en el cuerpo humano. Empezamos a trabajar enla primera edición hace dos décadas, cuando éramos mucho más jóvenes. Desdeentonces, hemos presenciado una explosión de interés, investigación yexperiencia clínica que ha impulsado a El hombro a través de cuatro edicionesmuy exitosas. Desde la cuarta edición en 2009, el número de artículos, técnicasquirúrgicas y dispositivos relacionados con el hombro ha crecido casi más alláde toda comprensión. Algunos han representado verdaderos avances en el campo, pero otros no handemostrado ser valiosos para el conocimiento con el que practicamos la cirugíade hombro ni para los pacientes a quienes intentamos ayudar a recuperar lacomodidad y la función de su hombro.
Es hora de preguntar: «¿El costo incrementado de esta nueva herramienta dediagnóstico o implante ha sido justificado por el mejoramiento en losresultados clínicos experimentados por el paciente?» Por ejemplo, ¿la mayorprecisión en la medición de la retroversión glenoidea usando complejosprogramas de reconstrucción tridimensional se ha traducido en una mejoríademostrable en los resultados del paciente? Siguen surgiendo nuevos métodospara obtener imágenes y tratar de reparar los desgarros del manguito rotador,pero ¿estos métodos conducen a tasas más altas de integridad del manguito?Sabemos cómo suturar el labrum de vuelta a la cavidadglenoidea, pero ¿beneficia esto al paciente? ¿Deberíamos estar realizando unatransferencia de coracoides para manejar el caso rutinario de inestabilidadglenohumeral traumática recurrente? ¿Qué deberíamos aprender de la apariciónhistórica y la subsiguiente desaparición de las técnicas de láser yradiofrecuencia o de la infusión intraarticular de anestésicos locales a travésde bombas para el dolor? ¿Cuáles pacientes con fracturas humerales proximalestienen más probabilidades de beneficiarse del tratamiento no quirúrgico, lafijación interna, una prótesis humeral o el reemplazo total inverso de hombro?¿Producen los implantes humerales de rejuvenecimiento, sin tallo o de tallocorto, mejores resultados clínicos que el tipo estándar de componente humeralque ha servido a los pacientes durante medio siglo? Para ayudar a responderestas y muchas otras preguntas que a diario enfrentan los cirujanos de hombro ysus pacientes, hemos reclutado un magnífico grupo de autores de todo el mundo,especialistas que han dedicado sus vidas a buscar mejores formas de atender asus pacientes. Estos autores nos han proporcionado una perspectiva nueva yactual para ayudar a guiar nuestra práctica.
Debido a que hay opiniones diferentes sobre cada tema importante, también hemospedido a los editores de nuestros capítulos que expresen al final de cadacapítulo su propia opinión sobre el tema. Adicionalmente, para la mayoría delos capítulos hemos pedido a expertos internacionales muy respetados o aeditores de alto nivel que aporten sus pensamientos sobre el tema. Alseleccionar estos comentarios, nuestra meta fue encontrar cirujanos quesabíamos que tenían una visión diferente a la nuestra para que el lectorestuviera aún mejor informado. La característica más interesante de la cirugíadel hombro es su dinamismo: los paradigmas existentes son constantementedesafiados, cada día se están evaluando nuevos enfoques para el diagnóstico yel tratamiento. La evidencia publicada está siendo continuamente evaluada yreevaluada para extraer una orientación para nuestra práctica. Los cirujanos seapegan a estándares cada vez más altos. Hemos intentado capturar esta dinámicaal proporcionar el resumen más actualizado del estado presente de la ciencia,con la esperanza de que esta presentación proporcione un marco corriente parala práctica, así como una base para construir lo que será un más alto nivel dedesarrollo en los días venideros. Gracias, lectores nuestros, por ser parte deesta evolución. Como nos gusta decir, «¡Feliz hombro!»
Frederick A. Matsen III, MD